Alimentación y sol: ¡el bronceado perfecto!

Se acerca el momento de lucir piel y hacerlo con un tono bonito, saludable y duradero. Nuestras fórmulas te ayudan desde el exterior… ¿sabes hacerlo desde adentro? Prepara tu piel para el sol… ¡comiendo!

¿Sabías que hay alimentos que no sólo te ayudan a mantener el bronceado, también a acelerarlo y lucirlo más bonito? ¡Ahí  van!

  • Para acelerarlo: alimentos ricos en betacarotenos como las espinacas, los espárragos, el tomate, las acelgas, la albahaca, el melocotón y el mango y, por supuesto, ¡la famosa zanahoria! Doble función: estimulan la producción de melanina, responsable del tono de la piel y protegen de las agresiones externas, y por tanto, del envejecimiento prematuro.
  • Para prolongarlo: ácidos grasos presentes en aceites vegetales, pescados azules y frutos secos. Hidratan la piel y le dan mayor elasticidad, permitiendo que el bronceado dure más tiempo.
  • Para protegerlo: la vitamina C presente en frutas cítricas y rojas, NO acelera el bronceado, pero sí protege el colágeno y la elastina, las proteínas que mantienen tu piel tersa y firme, y que son atacadas con la exposición solar. También esencial la vitamina E presente en legumbres, cereales y frutos secos, neutralizan las agresiones del sol en la piel.
  • Para lucirlo más bonito: ¡AGUA! Una piel bronceada no hidratada envejece más rápido y no luce bonita. Aumenta la cantidad de agua y líquidos (zumos naturales, gazpachos, sopas) y tu bronceado brillará como nunca.

IMPORTANTÍSIMO:  Protección solar. Destierra el mito de que, con protección, no te bronceas. ¡FALSO! Un bronceado gradual dura más tiempo. Y la juventud de tu piel… ¡también!

¿Empezamos?

 

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